martes, 16 de agosto de 2016

Lo que pudo ser

El Barranco del Monasterio y la Alberquilla son unos espacios forestales que deben revertir positivamente hacia la sociedad de su entorno.
A nuestro juicio son fincas de enormes dimensiones infrautilizadas en su potencialidades. La madera -en sus diferentes usos-, el aprovechamiento cinegético -el tradicional y las nuevas modalidades conservacionistas-, el apícola, las resinas, las piñas, las aromáticas, la montanera, el turístico, las setas... son recursos que gestionados de manera integrada y coordinada pueden dar enormes beneficios en empleo en los municipios circundantes de Campillo de Arenas y Cárcheles. Se trata de favorecer el desarrollo y la compatibilidad de los diferentes usos y aprovechamientos.
Desde la Huerta de los Frailes contemplábamos hace unos días un conato de incendio en plena masa forestal que pudo haberse convertido en una tragedia si las condiciones metereológicas de ausencia de viento, la tormenta de un par de días antes, y la pericia del servicio contraincendios no hubiesen servido de freno. La masa forestal monoespecífica de pinar del espacio histórico del Barranco del Monasterio hoy es una madeja de pinos repleta de troncos muertos abatidos hace años, sin acceso posible desde Carchelejo, infranqueable, inaccesible, imposible de llegar con medios terrestres, lo que nos puede llevar a la contemplación cualquier verano de su extinción por el fuego.
Hace 50 años esas fincas eran de monte mediterráneo que servían para criar a miles de cabezas de ganado lanar y vacuno. Con los planes de repoblación forestal del recién creado ICONA, los ingenieros forestales expulsaron a los ganaderos del lugar, que tuvieron que emigrar a los cinturones industriales emergentes de Cataluña y País Vasco, y las trochas por donde circularon durante milenios el ganado se cerraron para satisfacer los intereses de la industria del papel de este país. Montes al servicio de un diseño industrial que ni siquiera se llevó a cabo posteriormente.
Ha llegado la hora en que la sociedad del entorno volvamos la vista hacia ese espacio y demandemos de él creación de riqueza para la zona.

No hay comentarios: